Este recinto eclesiástico es uno de los lugares más icónicos de la Perla Tapatía, pero también de la Iglesia Católica en México.
Foto: Shutterstock
Las calles de Guadalajara guardan cientos de historias, no por nada es una de las grandes ciudades de México. Sus construcciones también son ejemplo de los secretos que se hallan en esta urbe con joyas arquitectónicas que se presumen a nivel internacional.
En esta ocasión hablaremos del Templo Expiatorio del Santísimo Sacramento, considerado un referente del estilo neogótico que tiene gran importancia no solo entre los puntos que debes conocer en tu visita, sino también para la Iglesia Católica.
Este edificio no es en realidad un templo, sinouna basílicay su construcción fue posible porque los fieles católicos querían un recinto dedicado al Santísimo Sacramento, es decir de la representación de Cristo.
Gracias a esto es que encontrarás al Santísimo Sacramento en cualquier momento que vayas, esto con el fin de que los pecados de los fieles sean perdonados.
La construcción de este recinto data del 15 de agosto de 1897, fecha en que se colocó la primera piedra en este predio ante la autorización del Arzobispo Loza y Pardavé, tras una recomendación del mismo Papa León XIII. Sin embargo su construcción tardó en total 75 años por la Revolución y la guerra Cristera.
Su construcción no fue de inmediato porque la selección de su diseño tardó muchos años e involucró a tres arquitectos con ideas diferentes. El último de ellos fue el arquitecto Adamo Boari, traído desde Italia por Porfirio Díaz. Para su proyecto retomó aspectos del gótico italiano con reminiscencias bizantinas, por lo que su propuesta tiene un parecido a la Catedral de Orvieto, ubicada en la provincia de Terni, en Italia.
La construcción del Templo Expiatorio del Santísimo Sacramento avanzó entre 1901 y 1912, pero la Revolución Mexicana detuvo los trabajos hasta 1919. En ese año se organizaron nuevos cambios en la construcción y se le pidió al arquitecto mexicano Ignacio Díaz Morales Álvarez Tostado resolver los problemas estructurales del recinto.
Todos los trabajos que se llevaron a cabo en este recinto marcaron un parteaguas para la Iglesia Católica e incluso sirvieron para explorar nuevos temas de discusión dentro del Concilio Vaticano II, cuya intención fue llevar a la Iglesia rumbo a la modernidad.
Sus altos pilares de piedra, sus figuras de bronce, así como los contrastes lumínicos que se generan entre los pasillos donde impera la oscuridad y el camino principal, iluminado por la luz que entra a través de sus vitrales, forman parte de los motivos por los que este lugar se ganó los corazones de los habitantes de la Perla Tapatía.
Entrar a esta iglesia hace que los turistas se sientan en un viaje directo a Europa gracias al estilo gótico, sobre todo a la hora de escuchar misa gracias al sonido de su campana principal en sus muros y el órgano monumental que posee.
Ya sea que te quedes escuchando la misa del día o que entres solo para observar el magnífico interior de este templo, la visita al Templo Expiatorio del Santísimo Sacramento es una cita obligada si es que vas a Guadalajara, de lo contrario se dice que no podrías decir que conociste la Perla Tapatía.
Foto: Quinta Real Guadalajara
El Templo Expiatorio del Santísimo Sacramento queda en el centro de Guadalajara, pero a 10 minutos en auto llegarás a la que es una de las joyas secretas de esta ciudad.
Muy cerca de la Glorieta de la Minerva se encuentra Quinta Real Guadalajara, un hotel de lujo donde se mezclan el pasado, el estilo virreinal y todas las comodidades que necesitas para tu viaje.
Al pisar las instalaciones de este hotel te sentirás en otra ciudad, ya que sus paredes de piedra rosa, sus muebles de madera y el lujo que se refleja en cada rincón del hotel te sentirás como si estuvieras en la época colonial.
En tus días de relajación, disfruta de la alberca y la vegetación que le rodea e incluso deun pequeño acueducto y una fuente.
Foto: Quinta Real Guadalajara
Una particularidad que tiene este sitio es que a pesar de estar en una de las zonas de mayor actividad tanto de entretenimiento como de negocios es que contarás con una completa calma dentro de tu suite, así como en sus jardines, gimnasio y demás.
Descubre estas y otras joyas que tiene Guadalajara hospedándote en los hoteles de Camino Real, siendo Quinta Real una de las opciones que tiene esta cadena.
Si quieres un hotel con una arquitectura más moderna y con elementos que también ofrecerán un descanso a tu alma entonces puedes visitar también Camino Real Guadalajara, que fue diseñado por Luis Martínez Negrete y que destaca por ser un complejo horizontal.
Real Inn Guadalajara Expo es otra opción para los visitantes de Guadalajara, aunque este complejo está en la zona comercial de la ciudad y destaca por su cercanía a Expo Guadalajara, donde hay una constante vida en cuestión de negocios.
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